El programa estadounidense de espectáculos Chisme No Like llegó oficialmente a su fin este miércoles, según se confirmó recientemente. Este espacio televisivo, que en su momento fue un competidor feroz de programas consolidados como Ventaneando, marcó una época en el mundo del entretenimiento. Sin embargo, su desenlace parece haber estado rodeado de conflictos internos que provocaron la separación entre sus principales conductores, Javier Ceriani y Elisa Beristain.
De acuerdo con declaraciones de El Lobo, exintegrante del programa, una serie de situaciones complicadas llevaron a la ruptura entre los presentadores. En particular, los reportes de Kadri Paparazzi indican que la relación profesional entre el argentino Ceriani y Beristain se deterioró, pues esta última buscaba ser el centro de atención en todas las decisiones del show. Además, se señaló que el financiamiento del programa provenía en gran medida del productor Pepe Garza, esposo de Beristain, lo que generó tensiones adicionales.
El programa estadounidense de espectáculos Chisme No Like llegó oficialmente a su fin este miércoles, según se confirmó recientemente. Este espacio televisivo, que en su momento fue un competidor feroz de programas consolidados como Ventaneando, marcó una época en el mundo del entretenimiento. Sin embargo, su desenlace parece haber estado rodeado de conflictos internos que provocaron la separación entre sus principales conductores, Javier Ceriani y Elisa Beristain.
De acuerdo con declaraciones de El Lobo, exintegrante del programa, una serie de situaciones complicadas llevaron a la ruptura entre los presentadores. En particular, los reportes de Kadri Paparazzi indican que la relación profesional entre el argentino Ceriani y Beristain se deterioró, pues esta última buscaba ser el centro de atención en todas las decisiones del show. Además, se señaló que el financiamiento del programa provenía en gran medida del productor Pepe Garza, esposo de Beristain, lo que generó tensiones adicionales.
